Por Frida Modak

Los imperios,históricamente, nunca han sido de fiar.Sus particulares intereses siempre estarán por encima de los compromisos con sus aliados.No importa en cuántas instancias se reúnan y acuerden los individuos más ricos de los países más poderosos,seguirá siendo así.

Esto viene a cuenta de lo que está sucediendo con los energéticos.En teoría, las guerras desatadas por Estados Unidos contra Afganistán e Irak debían ser el comienzo de la recuperación del control del petróleo del Medio Oriente y su precio,que perdieron las potencias coloniales europeas,Gran Bretaña en primer lugar,y las grandes empresas petroleras, representativas de los intereses de Estados Unidos en su gran mayoría.

Pero la teoría y la realidad suelen ir por caminos diferentes y eso es lo que está pasando.La administración Bush con todos sus "think tanks"no ha logrado sus objetivos.No controla la situación interna de los países que agredió y, mucho menos, se ha apoderado del petróleo de la región en los términos que preveía.

Los precios del energético suben cada día, en alguna medida por los cambios que las autoridades estadunidenses introdujeron en el combustible para automóviles, pero fundamentalmente por las amenazas que ahora formula la administración Bush contra Irán,país en que se ha enriquecido uranio con vistas  a construir plantas nucleares que generen electricidad.Y en materia nuclear Estados Unidos pretende tener siempre la supremacía.

La administración Bush no admite los fracasos en las guerras que emprendió y ahora trata de encontrar aliados para"sancionar" a Irán.Pero,al mismo tiempo,buscan carbón aplicando los métodos destructivos que han usado en las explotaciones mineras en los países subdesarrollados.

La semana pasada nos referimos al Proyecto Censurado,creado por el Departamento de  Sociología de la Universidad de Sonoma State,California, cuyas publicaciones dan a conocer las informaciones que la prensa del norte oculta.Una de esas informaciones se refiere al carbón.

John Conner denuncia en su artículo para Proyecto Censurado que "La minería del carbón está destruyendo las cimas de las montañas de EEUU volándolas con dinamita en vez de utilizar mano de obra minera, mucho más cara.Cumbres que la tierra y la naturaleza forjaron en cientos de millones de años desaparecen de un plumazo a cambio de unas pocas toneladas de carbón más barato".

Se aplica el sistema de remoción de tope de montañas  y se actúa bajo la ley de Control de Minería de Superficie,sin que importe la destrucción de la biodiversidad,la descarga de basura en los valles y cauces de los ríos y la devastación de los ecosistemas.Lo que interesa es abaratar costos,porque así se ahorran el salario de los mineros y la inversión que representa abrir una mina en condiciones de seguridad.

La Unión Europea lleva ya varios años cerrando minas de carbón,reduciendo subsidios estatales y eliminando puestos de trabajo,también registró bajas el suministro de carbón,pese a que éste es el mayor generador de electricidad en esa región.Sólo Gran Bretaña,siempre alineada con los estadunidenses,se había retrasado en el cumplimiento de las metas fijadas a los integrantes de esa Unión.

En América Latina no lo han hecho mal,se han cerrado minas importantes tanto por eludir los pagos a los trabajadores como por razones políticas.La historia de los mineros del carbón,en todas partes,es una historia de lucha social,basta decir que en Estados Unidos el partido Trotskista se desarrolló en paralelo con las grandes huelgas del sector carbonífero.

El carbón es el combustible fósil más abundante, a fines del 2000 las reservas se estimaban en un billón de toneladas, accesibles desde el punto de vista económico y con tecnologías limpias para su explotación.Esas reservas alcanzaban para 250 años a los niveles de producción de 1988 y son cuatro veces mayor que la reserva de petróleo.

Esto podría motivar la búsqueda estadunidense de carbón, fracasadas sus guerras por el petróleo, pero en ningún caso podría justificar los dinamitazos contra las montañas. 

El precio del petróleo subió nuevamente la semana que termina.El Brent llegó al record de 71.68 dólares el barril y se utiliza como referencia por cerca del 60 por ciento del petróleo que se produce en términos globales, en particular el africano.

Sin embargo, los expertos dicen que podría subir más,porque si se actualizan los precios  de los años setenta,cuando la OPEP empezó a fijarlos,el barril  de esos tiempos se cotizaría hoy entre 90 y 100 dólares.En esa perspectiva,no es de extrañar que se redescubra el carbón y que se vuelvan a valorar la energía eólica y solar entre otras

Hay muchos tipos de energía alternativa, algunas de las cuales se pueden incluso combinar.Es más,antes de terminar su período el entonces presidente James Carter firmó una ley que permitía la fabricación de combustibles sintéticos con un costo que podía llegar a 100 mil millones de dólares y producir en 1987 el equivalente a 500 mil barriles de petróleo diarios y a dos millones y medio de barriles diarios en 1992.Con ese fin se creó la Synthetic Fuels Corporation.

Por su parte, la Exxon Corporation había iniciado la construcción de una planta de combustible sintético en Colorado,pero suspendió el proyecto en 1982 por estimar que los costos de la construcción habían subido mucho y ese combustible sólo se necesitaría cuando se agotaran las reservas petroleras.Se estimó también que Estados Unidos podía seguir presionando para controlar los precios.

Sería interesante saber en qué forma los países considerados aliados de Estados Unidos procesan o siguen estas informaciones y si continúan con su castigo a la minería del carbón.Algo más ha de manejar el imperio para estar destruyendo sus montañas.